Durante las vacaciones navideñas una empresa y los empleados municipales se han esforzado por limpiar el centro | El Ayuntamiento espera ahora la valoración del seguro con varias instalaciones todavía afectadas

La borrasca Elsa golpeó con fuerza en la provincia de Burgos siendo uno de los temporales más agresivos de los registrados en los últimos años. El temporal de agua y viento provocó numerosas inundaciones. Uno de los puntos más afectados fue Melgar de Fernamental. El Pisuerga se desbordó a su paso por la localidad y anegó buena parte de la ribera afectando a numerosas instalaciones de Melgar como el instituto, el campo de fútbol, la potabilizadora, el frontón, el polideportivo municipal, varios invernaderos y el centro de interpretación Pisórica.

El instituto tuvo que ser desalojado, más de 20 centímetros de agua entraron en el centro. Los daños no fueron exagerados, ya que los materiales más importantes se trasladaron, ante la previsión de inundación, a la planta superior. La inundación no afectó a la asistencia a clase, ya que comenzaron las vacaciones navideñas. Durante todos estos días una empresa contratada por la Dirección Provincial de Educación, con ayuda de los empleados municipales, se ha afanado en limpiar y poner a punto el centro.

Hoy, como confirma José Antonio del Olmo, alcalde de Melgar, los alumnos del instituto podrán regresar a las clases «con normalidad» aunque las consecuencias de la inundación siguen visibles. Del Olmo explica que el instituto ya está acondicionado y en el día de ayer se trabajó en ultimar los detalles para recibir a los alumnos. «Las clases se encuentran, casi todas, en la planta superior, por lo que el agua no las ha afectado. En la planta baja se encuentran, sobre todo, despachos y la cafetería», apunta el regidor.

El director provincial de Educación y el delegado territorial de la Junta han estado pendientes de la evolución de las tareas en el instituto, como confirma el alcalde de Melgar. Los empleados municipales han ayudado en las tareas de limpieza exterior de las pistas deportivas mientras la empresa contratada se centraba en el interior.

Los alumnos regresan hoy a las clases con normalidad aunque algunas consecuencias de las inundaciones siguen siendo visibles. Del Olmo explica que hay alguna puerta, armarios y meses hinchadas por el agua. «Estamos esperando a que sequen para ver si hay que tirarlas y no se rompen o se acaban resquebrajando», apunta el alcalde.

A la espera de la peritación

Del Olmo todavía no tiene cifras ni le han comunicado una cifra aproximada sobre los daños. Se han esforzado en trabajar en el instituto para posibilitar el regreso a las clases pero el regidor confirma que se encuentran «sobrepasados» por todo el trabajo que queda por hacer en el resto de instalaciones del pueblo.

Los vestuarios del campo de fútbol, los de las piscinas, el frontón, el polideportivo o el centro Pisórica siguen en mal estado. «Estamos esperando al perito del Consorcio para que haga una valoración pero aún queda mucho por hacer», confiesa el regidor.

La caldera del polideportivo y la del centro Pisórica acabaron cubiertas de agua. En el entorno de la laguna artificial del mismo centro Pisórica el agua también se llevó mucha tierra que habrá que reponer, al igual que muchas vallas.

Fuente de la noticia: Burgos Conecta

Fuente de la fotografía: La N-120 se cortó ante tras el desbordamiento del río Pisuerga. / Ricardo Ordóñez / Ical