Visibilizar la realidad de las personas con discapacidad intelectual o enfermedad mental es el objetivo del proyecto ‘Amyguelones’, un cuento infantil que habla sobre la inclusión social en tiempos de Atapuerca, de cuya impresión y encuadernación se encargarán los chicos que trabajan en el taller de imprenta de la Fundación Conde Fernán Armentález de Melgar de Fernamental. El proyecto ha contado con la colaboración de la Fundación Atapuerca y la Fundación Bancaria ‘la Caixa’ y se ha presentado esta mañana en el Museo de la Evolución Humana.
‘Amyguelones’ narra la historia de Miguelón y Benjamina, dos niños que vivían en Atapuerca durante el Paleolítico. Benjamina tiene problemas de movilidad, pero Miguelón está siempre con ella, ayudándola en el día a día. Además, ambos niños ayudan a una persona mayor dependiente, ha explicado Asunción Ortega, la directora gerente de la Fundación Conde Fernán Armentález. Se trata de un cuento infantil sobre la discapacidad, un tema que no se aborda a menudo en este tipo de literatura, que muestra que ya nuestros antepasados se ayudaban unos a otros.
La historia está basada en hechos reales, en la información obtenida en el proyecto de excavaciones de los yacimientos de Atapuerca, que muestra cómo personas mayores, dependientes o con discapacidad pudieron sobrevivir más de lo habitual gracias a la ayuda de sus congéneres. La ilustradora, Mónica Puras, ha calificado al historia de “fascinante”, recordando que se han inspirado en personajes como el cráneo número 14 de Atapuerca, el de Benjamina, o la pelvis ‘Elvis’, que recuerda mucho al abuelo del cuento.
Integración
La iniciativa sirve también para dar visibilidad al colectivo de personas con discapacidad intelectual o enfermedad mental, con las que la Fundación Conde Fernán Armentález lleva trabajando más de tres décadas en Melgar de Fernamental. El taller de imprenta, en el que participan doce usuarios, se encargará de la impresión y encuadernación de los ejemplares del cuento. Se hará todo manualmente, en un trabajo de artesanía muy elaborado, y se editarán 1.000 libros, por lo que el taller tiene tarea para los próximos doce meses.
Asunción Ortega ha recordado que la Fundación Conde Fernán Armentález atiende a medio centenar de usuarios, a través de sus diferentes servicios, y que la vida de las personas con discapacidad intelectual o enfermedad mental es bastante cómoda en un municipios como Melgar. Tiene el tamaño ideal para contar con servicios y recursos, deportivos, culturales, formativos y de ocio, pero también para que sea un entorno seguro, porque todo el mundo se conoce, así que estas personas gozan de mayor libertad de movimientos.
Fuente de la Noticia: Burgos Conecta